viernes, 6 de mayo de 2016

Una vista atrás.

Hace unos días estaba charlando con una amiga que vive en España que cumple dentro de nada 5 meses de embarazo y nos dimos cuenta de lo rápido que pasa el tiempo.

En navidad todas mis primas, que ya son madres me decían que disfrutara del embarazo que pasaba muy rápido. He de reconocer que no me lo tomé muy en serio, pensaba que no era posible que 9 meses pasaran rápido cuando un día de trabajo a veces se hacía taaan largo. 

Pero ayer empezamos la semana 32, y con ella nos ponemos en la mitad del octavo mes.
Ocho meses ya!, me puse a echar la mirada atrás y decidí escribir éste post resumiendo un poco lo que han sido estos meses para mi.



Fui muy afortunada al principio del embarazo porque no tuve síntomas notables más allá de las náuseas por un par de productos de limpieza para el baño o el olor del tabaco, que desaparecieron al acabar el primer trimestres. Y esa horrible reacción alérgica que me salió cuando empecé a usar Nivea para evitar las estrías, que por suerte desapareció al cambiar de crema. 

En el cuarto mes de embarazo noté por primera vez las famosas burbujitas, como ya os digo no tenía síntomas aparte de la congestión nasal que comenzó a la vez que el embarazo y aún hoy sigue conmigo, por lo cual sentir esas burbujitas era realmente gratificante porque significaba que mi pequeño bichito estaba bien, estaba ahí dentro y convertía el embarazo en algo más real, porque por esas mismas semanas ya empezaba a notarse la tripita que durante el quinto mes sólo haría que crecer y crecer cada día más y a vibrar cada vez que Etel pataleaba.

El sexto mes, en parte se acabó lo bueno. El elefantito decidió que boca abajo se vive muy bien y plantó su culo bajo mi costillar, con la consecuente presión y molestia que ésto ocasiona. También fue un mes notablemente malo con respecto a la acidez, empezó a darme super fuerte de tal manera que conseguía despertarme por las noches y ya no había manera de volver a dormir.

El séptimo mes conseguí controlar la acidez, a costa de que paparockero esté harto de subir leche a casa porque puedo beberme dos litros díarios, pero oye, la mantengo a raya. :D
Se empieza a hacer muy notable ya el crecimiento de la barriga y los consiguientes sofocos al subir escaleras o incluso andar un poco rápido. El dolor lumbar ya es nuestro pan de cada día, aunque eso no sólo es culpa del embarazo, sino que como ya sabéis llevamos un año durmiendo con un colchón en el suelo y todo afecta.

En éste octavo mes la verdad es que estoy echa una piltrafa, el cansancio acumulado se va haciendo notar, la tripa ya es muy grande y cuesta encontrar una postura, ya sea sentada o tumbada, en la que no duela nada. Etel está empezando a encajarse y las molestias en la ingle se hacen notar de vez en cuando y sigue con el culo bajo las costillas por lo que andar y hablar a la vez se va complicando. He notado también durante éstas últimas semanas que después de un largo paseo se me hinchan las piernas y los pies bastante, pero nada que unas duchas de agua fría no solucionen.

Viendo lo que muchas de vosotras contáis creo que, aunque haya días que lo único que deseo es que acabe ya y pueda recuperar mi cuerpo, mis posturas para dormir y subir dos escalones sin ahogarme, realmente no puedo quejarme.

¿Vosotras como estáis llevando el embarazo?, ¿estáis tenido mucho malestar?

No hay comentarios:

Publicar un comentario